lunes, 25 de noviembre de 2013

MI ANDADURA...

 
 
MI ANDADURA...
 

Tengo una amiga que empezó hacer yoga, y una día que me la encontré y al preguntarle cómo estaba me comento lo bien que estaba, que había empezado hacer yoga y que sus problemas los iba comprendiendo, y que cada situación tenía un porqué…
 
Ella tenía un problema neurológico, que la hacia arrastrar un pie, al principio apenas se le notaba, pero después era penoso verla andar, pero ella según fue agrandándose su enfermedad… emocionalmente se encontraba mejor, y la ley del Karma apareció en su mente y en su recuperación interior, dejando atrás las pataletas de su día a día.
 
Me dijo... Lola, porque no te vienes conmigo, a lo mejor a ti te ayuda con tus recuerdos! dijo eso porque, yo no recordaba nada mi niñez, ni de mi adolescencia,  yo vivía sin haber tenido pasado, como si hubiese nacido el día anterior, y eso me había acostumbrado a no tener angustia, era así, sin más.
 
Yo fui dando largas, no me apetecía salir a las ocho de la noche y ya camino del invierno, además eso no era para mí… y me dijo, vente un día a ver la clase y así ves lo que hacemos.
 
Fui un día, más que nada para que mi amiga me dejase en paz… cuando llegue me sorprendió el profesor, menudo, sencillo y sereno, tanto que sin ver la clase y el yoga que hacían dije… quiero venir a sentir mi yo interior, y él me dijo… tendrás que esperar, ahora no hay plazas, no quiero más de doce personas para poder atender bien a cada una. Y me marche un poco enfadada, diciéndome a mi misma ¡Lo ves, como esto no es para ti…!
 
Al cabo de dos semanas me llamaron por teléfono, un chico de los que iba a las clases, por tema de trabajo tuvo que pasar a la hora más tarde, y esa plaza la aproveche yo.
 
Y empezó mi andadura por un mundo desconocido y que pronto se lleno de recuerdos, sensaciones, emociones y porque no decirlo, también de llantos de tanto recordar,  mi mente se lleno de imágenes, y mi corazón de letras…
 
Allí permanecí ocho años, hasta que tuve que dejarlo momentáneamente por la enfermedad de mi madre y su muerte meses después. Y el yoga me enseño a entender su marcha sin que me hiciese daño, y su partida a un mundo mejor necesaria, y sus últimos momentos a su lado junto a mi hermana mayor a la que consolé porque ella no tendía el porqué mi madre se tenía que marchar, ahora que su vida se había vuelto serena, aunque ella dejo de recordar… sembrando mi vida de recuerdos, como se siembran flores en un jardín nuevo, que nadie cuido jamás.
 
Ahora sé que el yoga es una buena filosofía si estas abierta a tu ser, que nada cambia si tú no quieres, pero que el yoga no es hacer cuatro posturitas raras, eso es lo que te lleva a una meditación necesaria, para que tu mente y tu cuerpo se unan y sepas de la aceptación, el vivir en paz, y en la ayuda a quien este cerca y te la pida, nada de interferir en otras vidas, solo estar es necesario, y no juzgar a nadie, solo ser canal y dejar que la energía no se pare en sitios que te haga mal.
 
Así fue mi andadura por el mundo de las energías, y del saber lo que fuiste, y aprender lo que serás, sin más.

 

11 comentarios:

Verónica O.M. dijo...

Lola, leyéndote dan ganas de probar.
Besos

Flor dijo...

Hola cariño , desconocía está faceta tuya... Yo te pregunto ¿ y a ti que tal te va , has vuelto al yoga ? creo que tendré que probar yo también tendré que probar. Besos de flor .

BEGO dijo...

Vuelve hacer si así te sientes bien..
BESOS

Lola dijo...

Si Vero, fue una experiencia fantástica, duro lo que mi aprendizaje necesito, después de ocho años, y de ver como mi madre se “marchaba” decidí que el yoga había cumplido su misión en mi, y empecé hacer nuevas cosas y solo quedo el recuerdo, y supe afrontar lo que iba llegando de otra manera. Gracias por tu comentario, y te animo a probar ya verás que bien te sientes. Un beso.

Lola dijo...

Hola Flor, pues si que me va bien, aprendí muchas cosas, y sobre todo aprendí a no atarme a cosas materiales, y sobre todo aprendí a no sufrir por lo que no merece la pena, el sufrimiento es inútil, el dolor se borra. Gracias amiga, y también te digo lo mismo que a Vero, prueba, te encantara. Un beso amiga.

Lola dijo...

Hola Bego, pues si que me sentí bien, ahora es otra vida, hago cosas nuevas, y el yoga en estos momentos no entra en mis planes, no descarto en otro momento volver. Gracias por tu comentario. Un beso.

Marina-Emer dijo...

Hola amiga ...he leido todo el relato que nos haces sobre el yoga....yo tengo un hijo operado decorazón y empezo de muy pequeño ,sigue al yoga y esta muy contento y ya ves operado de corazon abierto.gracias por tu visita yo estoy en recuperación de una caida en la ducha y lleve 45 dias el brazo inyesado ,estoy en recuperacion pero uf como me duele
besitossssssssssssss
Marina

Ángela dijo...

Lola qué bien te comprendo!! Llevo ya años practicando yoga y seguiré mientras pueda. Es verdad que hay mucha gente que tiene una idea equivocada. El que quiera que vaya y pruebe. Yo me siento bien a todos los niveles. Fantástico!!
Muchos besos

Lola dijo...

Amiga Marina, cuanto siento que hayas estado malita, esa caída en la ducha… te ha podido costar caro, ya puedes tener cuidado de ahora en adelante, y es que te he echado de menos.
Lo que me dices de tu hijo acerca de sus clases de yoga me parece fantástico, el yoga es una disciplina fantástica que hace que todos estemos mejor.
Cuídate mucho amiga, y me alegro de que hayas vuelto a escribir. Un beso grande.

Lola dijo...

Pues así estas de bien amiga Ángela, el yoga hace que se nueva no solamente el cuerpo, también los sentimientos dejados dentro de nosotros olvidados, a mi me hacía muy bien, ahora estoy en un periodo de espera de no sé qué…
Te mando un abrazo amiga.

María Bote dijo...

Pienso que, me haría mucha falta ahora hacer algo así como el yoga, pero, escucho diversidad de opiniones; unas como la tuya, que te hizo mucho bien en su momento y otras, que no sirve para nada.

Así que aún no he tomado la decisión.

Un abrazo