EL BAÚL DE LA VIDA
Me gustan las personas, cuando las conozco si son jóvenes me
doy cuenta de la senda que aun han de caminar y vivir, si son mayores me siento
junto a ellas y pienso que calles, plazas y caminos habrán visitado para
llegar a ser tremendamente interesantes y sabias, entonces…
De los maduros pienso en ellos desde niños, como condiciono
el entorno en su decidir los estudios, los trabajos, las decisiones
tomadas , que los lleva a seguir
pensando en un ayer que ya jamás servirá para nada, solo los recuerdos están siendo
escritos en el libro de la vida, hasta llegar a terminar ese libro llamado
experiencia.
Y pienso en los padres amorosos, los hermanos, la familia grande o pequeña, que llegara
para hacernos recordar un momento mágico, y maravilloso, quizás triste,
o peor aun… a no querer recordar el daño de entonces.
Pero todo sirve, las cosas vividas nos da sinceridad al día
ya vivido, nada fue tan malo, o tan bueno que nos hayamos quedado enganchados en
el momento de vivirlo, no supimos como condicionaría nuestra existencia, y como
olvidaríamos cosas que como dicen a veces…
no sería importante para recordar, ya se sabe… memoria selectiva.
Yo hora pienso en mi ayer ya vivido, lo disfruto y lo
recuerdo, mi Madre y mis hermanos fueron mis mejores compañeros, mis amigas de
la niñez al cambiarme de ciudad de residencia no sé nada desde hace años, la
familia que después forme junto al amor de mi vida…¡ Fundamental! Y las
vivencias de entonces, ni las recuerdo aunque ya están escritas en las primeras páginas
del libro mi vida.
Por eso aunque me gusten las personas lejanas o cercanas,
todo me sirve para ser feliz ahora, para darme cuenta y ser fuerte, que al llegar los bofetones o las caricias
nada fue para tanto, y, hay cosas que me gustan menos, pero cada uno tendrá que
ser capaz de vivir y escribir el día a día con lluvia o con sol, todo da
sentido a mi vida, y todo os lo debo a todos los que en algún instante de su vida me han acompañado, mi libro está
escrito, vosotros estáis en mis paginas.