CONTIGO

CONTIGO

Contigo veo reír a nuestros nietos, me siento joven de verles correr a nuestro lado, aunque la casa vuelva a estar llena de juguetes tirados por todas partes, la casa respira de nuevo, alegría y vuelta a la juventud que hace mucho que ni recuerdo.

Contigo mi cuerpo se lleno de hijos, que vivieron, y crecieron a nuestro lado, llenando el corazón de alegría y la mente de problemas, de cenas llenas de risas, y de sueños que a mi no llegaban por el desvelo hacia ellos, como todas las madres.

Contigo tuve por primera vez algo mío, tu corazón, una casa, una vida plena, y un llanto que jamás antes había tenido, en una vida hay muchas etapas, y aun con todo ello, la suerte llego a mi el día que te conocí y decidiste conocerme mas, hasta llegar a decirme te quiero, y mi vida y la suya ya fueron una solamente.

Contigo decidí que quería vivir siempre, alejándome de mi madre y mis hermanos que eran los mas queridos, y en mi vida no había habido jamás cariño mas duradero, mas verdadero, sin ellos siempre me sentí perdida, sin mi madre, que se sintió igual que yo, por que al casarme ella se quedo sola en casa, y la casa aumento de tamaño, al igual que mis días sin ellos a mi lado.

Contigo aprendí a ser yo, a no asustarme de nadie, a ser solamente tu amor que era lo que yo había soñado desde siempre, buscándote en los sueños interminables, por que al despertar tu seguías conmigo, pero eso tu aun no lo sabias.

Por eso contigo he tenido tanto, que el día que me marche nada quedara por hacer, si me preguntasen que quiero hacer ahora, que todo lo tengo, diré que, solo vivir… contigo.

EN EL ALTAR MAYOR

EN EL ALTAR MAYOR

Cuando Helena leía, allí, en el altar mayor, en el día de su comunión (día 7 de mayo) y decía que bendecía a su madre por quererla, y enseñarla, y yo pensé…

¿A cual de sus madres se refiere? ella tiene dos madres, pero quizás ella no lo sepa aun, y al mirarla pensé que es lo que una madre siente cuando abandona a su hija, o quizás no la abandono, quizás murió al nacer ella, o los cambios en su país (Rumania) hicieron de esa pobre mujer, un ser desgraciado que no tuvo mas salida que la de dejarla allá, en un orfanato.

Ella, una niña preciosa, de rubio pelo, y ojos grises, como por entonces era su vida, termino teniéndolos azules, como el mar que ve todos los fines de semana, y que a ella la vuelve loca, y a los que estamos cerca también, por que es una niña tan viva, que no deja a nadie indiferente, con sus palabras y con sus risas, su inquietud y su querer saber mas cosas.

Pensé en como seria su otra madre, y pensé que en esos momentos quizás ella no estuviese viva, o que cada día pensara en su niña, y con angustia se preguntase ¿Dónde andará? Y jamás por mucho que piense podrá imaginarse como es amada, como su mamá de ahora volvió a la vida al encontrarla, y como en su vida no hay nada más importante que Helena (con H) que es como dice su mamá que se escribe su nombre.

ARRUGAS

ARRUGAS

Veré como se van posando en mi rostro, y seguirá la vida tejiendo sus arrugas cada día vivido, pero no importara el tiempo, por que tú estarás a mi lado.

Seguiremos juntos, como la pared y la hiedra, como la arena y el mar, y a veces tan lejanos como el cielo y el horizonte, pero eso no quiere decir nada por que yo te amo.

Podremos hablar de lo que hemos creado juntos, y como viviremos el futuro, pero lo mas importante es vivir nuestro presente, de nuevo como empezamos, siempre los dos, pero jamás digas la palabra solos, por que solo estarás cuando yo me marche, y aun así… no te dejare.

Tendrás tu aire y tu espacio, tu tiempo y tus días, pero no olvides vida que, tus noches serán mías como siempre, y en tu almohada, posare mi rostro, y como siempre desde atrás, desde tu espalda, mi brazo cruzara por tu cintura, y cuando duermas mi mano subirá hasta tu corazón, allí permanecerá hasta el amanecer, allí se quedara hasta el día que decidas viajar conmigo, al otro lado, cerca de los sueños, pero ya en la otra vida.

CHICOS DE HOY...

 

 

CHICOS DE HOY...

Confieso que al cabo de los años entendí que estaba malcriando a mis hijos…

Que jamás supieron hacerse la cama, y que jamás fueron capaces de encontrar algo en su cuarto, por que ni se molestaban en buscar, solamente decían ¿mamá donde esta… tal o cual cosa? Y allí estaba yo, para dárselo en mano.

 

Yo quería que fuesen autosuficientes, por que estarían solos algún día, y seria bueno que aprendiesen a cocinar, a ordenar sus cosas, y a saber encontrar donde las dejaban después.

 

Y cuando se marcharon de casa, con sus parejas, pensaron que todo seguiría igual que en casa, pero con sexo incluido, pero no fue así.

 

 

Sus parejas trabajaban, y al llegar a casa a veces después que ellos, no tenían ganas de cocinar, ni de planchar, ni de recoger ropa que un niño mal criado iba dejando por la casa, sin conciencia de que eso también es trabajo.

 

Y empezaron a darse cuanta de lo que había en su casa, nada mejor, pero si diferente, sus mujeres, chicas de hoy (gracias a Dios), piensan de otra manera, y un pantalón bien planchado ya quedo obsoleto, y ahora se va con prisas, comen lo que se pone a tiro, pero claro, también hay que llenar el frigorífico, por que solo no se llena.

 

Y se pierde el tiempo en el supermercado y en la cocina, en comérselo deprisa, y en no darse cuenta del tiempo que cada cosa necesita, y empezaron a guisar en sus casas, para ellos y sus mujeres, y ser una familia, sin tener que tener al lado a su madre, ellos felices, y yo más.

MIS ÚLTIMOS PENSAMIENTOS...

MIS ÚLTIMOS PENSAMIENTOS...

Tu hermana mía, que me entiendes como yo misma lo hago, quiero que me hagas el ultimo favor, y se que te costara, por que este tendrás que hacerlo cuando yo ya no este…

Dile a mi marido que jamás lo ame tanto como en los últimos años, cuando el dormía, y mi pie buscaba el suyo, y fue más de una vez mi único sueño, que me enamore cada día al verle, esperaba el regreso, y cuando oía las llaves en la cerradura de casa, mi corazón después de un día encogido por su ausencia, se desparramaba en mi pecho al sentirlo mío.

Que hubo malos ratos en nuestra vida que ya he olvidado, que hubo buenos días que no he olvidado aun, y que tuve una vida maravillosa a su lado , aunque mas de una vez no supe entenderle por que me aturdían sus gritos, y mis lagrimas borraban el ultimo “te amo” de mi garganta.

Dile a mis hijos, que me sentí perdida mas de una madrugada, cuando ellos aun vivían en casa y no habían llegado en los fines de semana.

Mis hijos (incluidas sus mujeres) diles lo mucho que los he amado, que mi corazón fue feliz el día que ellos se enamoraron de ellas, y desde entonces han sido parte de mi, aunque mas de una vez no me sentí querida, y que mis ojos lloraron muchas veces ante su indiferencia, "ella" ya sabe de quien hablo.

Dile a Andrea que, me devolvió la vida cuando creí que iba a morir pronto, y que me la quito más de una vez por un exceso de cuidado, por si se caía, si no comía, o si lloraba en la cuna.

Dile que fue mi luz en mis días oscuros, y calor en el otoño de mi vida, que me quede triste cuando se marcho de mi lado, y para mi fue como si me hubiesen robado a mi hija, y solo es mi nieta.

Y tu querida mía, habla con nuestros hermanos, diles que siempre he sido feliz siendo vosotros felices, que llore por vuestros hijos como por los míos, que fui una pesada, cuando estando tan lejos les escribía un montón de veces para que no se sintieran solos, lastima que por entonces no existía Internet, pero fue bonito contarles mis cosas, y sentirme mas querida que nadie.

Di a los que me han conocido que, tuve mucha suerte al encontrarlos, que mis amigos lo han sido siempre y después de muchos años, que jamás me enfade con nadie, y solo dejaron de quererme los que no lo habían echo nunca.

Y diles todo lo que ahora escribo, que siempre estarán conmigo, que  recordándoles tendré menos frío, y diles que estaré bien al lado de mi madre, y quien sabe si también de mi padre, que ya me querrá siempre, recompensándome por todo el tiempo que me abandono, pero eso … ya también lo olvide.

MUERE LENTAMENTE

MUERE LENTAMENTE

Muere lentamente, el que no sueña, el que no cambia, el que jamás se enamora, quien decide no ser de nadie aun necesitando ayuda.

Muere lentamente, el que piensa que se equivocan los demás, el que piensa y dice que el amor es siempre mentira, el que no quiere por egoísmo, y lo suyo es suyo, y no desea compartir.

Muere lentamente, el que cada noche cierra los ojos sin recordar a un ser querido, a un amor lejano, la sonrisa de un desamparado después de la tuya, negándole tu ayuda, pensando mas tarde y ¿para qué?

Muere quien desaparece sin morir, quien no quiere que nadie le moleste, quien no recibe una palabra de consuelo que antes negó él, quien piensa que es el ombligo del mundo.

No quieras morir olvidado de los que antes te quisieron, y aun te quieren, por que nadie se merece morir así... lentamente.

UNA MADRUGADA

UNA MADRUGADA

Recuerdo una madrugada que mi marido me desperto de pronto diciendome ¡¡¡ hay alguien bajo la cama!!! yo dormida aun y con mala uva por despertarme le conteste... déjame dormir, tu estas soñando, y seguí durmiendo.

Cuando volví a coger el sueño de nuevo me despertó y dijo ¿no oyes? Bajo la cama alguien se mueve, y su ropa roza en la moqueta, es que no oyes.

Yo muy enfadada le dije, pues asómate y sales de dudas y me dejas dormir, el muy asustado me dijo, mira tu… a mi me molesto el susto que tenia en el cuerpo, un tío mas grande que un castillo, asustado por un sueño...

Ya cansada de oírle encendí la luz y mire bajo la cama, y allí, un bulto de dos años dormía placidamente...

Mi hijo pequeño se había despertado, quizás con una pesadilla, y en vez de subir a la cama con nosotros se metió debajo, allí se sintió seguro, allí se quedo dormido hasta que nosotros le encontramos.

Era tan pequeño, que no supo que decirnos, y nosotros quedamos asustados, sabiendo que nuestro hijo nos daría muchas sorpresas a lo largo de su vida, y es que siempre tendríamos que estar alerta, nada seria previsible, porque un niño hiperactivo, no es tranquilo ni durmiendo, ni de cualquier manera.

El niño de la derecha es mi hijo pequeño, que siempre me tuvo en vilo… desde que nació, y aun sigue haciéndolo después de los años.

TE LLAMO

 

 

TE LLAMO

 

Te llamo por que la recuerdo a ella, te confundo la voz, por que extraño su ternura, y al oírte parece que aun esta cerca, que me siente, que me entiende, que aun me quiere.

 

Te llamo porque reconozco sus palabras en las tuyas, porque tu acento era su acento, porque oigo su corazón en tus latidos, y me gusta, me emociono, me relaja, siempre tienes la palabra justa que yo no encuentro en mi mente.

 

Te llamo cuando mi mente no me escucha, cuando mi corazón llora, o cuando mi cuerpo ríe, se siente bien, y quiero compartirlo contigo.

 

Te llamo cuando mi alma se queda a oscuras, porque no soy capaz de asimilar el tiempo que vivo sin ella, porque no puedo, porque no quiero olvidarla.

 

Te llamo y te llamare siempre, porque eres mi consuelo, mi dicha, y mi reflexión, sin poder yo sola aceptar que ella se fue, pero tú hermana mía, eres siempre mi ayuda y mi cobijo, tu amor se desprende en cada palabra, y me pego a ti como las sombras, y ellas desaparecen al hacerlo.

LA RADIO

LA RADIO

 

Recuerdo el tiempo en que las familias se reunían alrededor de la radio, al medio día oyendo “El Parte” por la tarde, yo llagaba del colegio cuando mi madre estaba terminando de oír la novela de turno (Ama Rosa, Lucecita, etc.) y por la noche primero “Matilde, Perico, y Periquín, y las radionovelas, que ya se oían cuando los peques nos habíamos ido o estábamos a punto de irnos a dormir.

Eran tiempos de trabajo e ilusiones, pensando en tiempos mejores que estaban a punto de llegar, al menos eso creíamos, y casi siempre se conseguía porque el trabajo no faltaba.

Ahora la radio se oye menos, las televisiones permanecen siempre encendidas aunque sea para hacer ruido, porque el silencio del alma es mucho, pero en el fondo la mente no nos deja descansar.

La radio era el alma mater de la casa, en las tardes noches de invierno lo era todo, “Los discos dedicados” con una inmensa lista de personas que solicitaban la misma canción, y que era dedicada a una persona, en su nacimiento, comunión, enlace matrimonial, y onomásticas todas.

Fue un tiempo que creímos que la vida no podía avanzar más, y que todo estaba bien, al menos los que no tenían ideas políticas, que eso de la libertad de expresión sonaba lejano, y nada tenía que ver con nosotros que creíamos ser libres porque nada pedíamos.

Yo fui feliz en la época de los seriales, mi madre antes de irnos a la cama nos dejaba oír a ese “Periquín” con el que me comparaban por lo mucho que hablaba, sobre todo lo que no debía, porque en mi casa, sin yo darme cuenta había cosas que nadie debería de saber, aun sabiéndolo todo el pueblo, la ausencia de mi padre.

Fue época de pan y trabajo, de silencios y escondites que aun quedaban de la “Guerra Nuestra”, la que dejo ausencias en todas las casas que jamás serian olvidadas, porque España está regada en sus cunetas  con la sangre de los siempre queridos.

CALIDEZ DE LA VIDA

CALIDEZ DE LA VIDA

Aprendí  a expresar mis sentimientos con el amor de mi Madre, y la indeferencia de mi padre. Aprendí a decir lo que siento cuando el corazón me dicta.

Aprendí amar cuando mi corazón dejo de pensar y mi alma se confundió con las olas.

Jamás he querido decir a nadie lo que se puede sentir detrás del reconocido sentimiento del amor, jamás le dije a nadie ámame como yo te amo, jamás quise querer porque me quisieran corazones solitarios, o personas que no son capaces de dar sin recibir a cambio algo, yo soy así, vivo en la nada, y siento en un todo.

Me gusta la vida como es, disfruto del mar con las aguas tranquilas y sus olas encarnizadas, porque forman parte del mismo mar, disfruto del viento en calma, como de las tempestades, porque todo es parte de ese viento que yo amo, disfruto del sol frío del invierno, y el sol cálido de cada primavera, porque eso forma parte de la vida, no me gusta el sol del verano que todo lo abrasa y derrite, no quiero soles que me abrasen dentro de mi ser, necesito la calidez y la vida, y no abrasarme en la muerte de la nada.

AYER

AYER

Mi madre me contó que cuando ella era pequeña todo era tan diferente, que… Seguro que yo no podría vivir así le dije después de contarme un montón de cosas, por ejemplo…

A ella la mandaba su madre a comprar en la tienda de ultramarinos de la esquina, que no compraba el aceite por litros, sino que llevaban la botella y pedían medio litro, o tres cuartos de litro, incluso un “cuartillo” que era la medida más pequeña que se usaba por entonces.

Me contó que todo se vendía suelto, que se pedía una onza de chocolate para la merienda, y no comprabas la tableta entera, y nada de bolsas de plástico cerradas al vacío, nada de leche pasteurizada, nada de agua mineral embotellada, y la miel la vendía un señor con una borriquilla, y te servia la que pedías a un recipiente de cristal que tu llevases, siendo siempre el recipiente donde era transportada un pellejo de piel, de no se cual animal, y todo eso era normal.

Me hablaba de las matanzas que se hacían en los pueblos, donde se juntaban las familias a matar un cerdo o varios, donde todos participaban, y donde los niños lo pasaban bomba, mientras esta labor se realizaba al menos una vez al año, y que se ahumasen o salasen bien, era la garantía de comer bien en el invierno, sin frigoríficos, ni congeladores como ahora todos necesitamos, poniéndose manos a la obra para hacer chorizos morcillas, y jamones, y todo era aprovechable.

Me contaba que el pan era solamente pan de pueblo como decimos ahora, nada de pan de molde, ni de semillas, ni de nueces, de soja, de ajo, de yogur, y de tantas variedades como hay en nuestras grandes superficies, que no hacían la compra del mes, solamente se hacia día a día, y nadie se moría de hambre, y yo me pregunto ¿y es eso era posible?

Me hablo de su casa sin calefacción, sin televisión, video, ni ordenadores, sin veraneos, y sin piscinas, sin discotecas, y apenas un cine (si lo había) y no en las multisalas que se instalaron por todas partes, donde escoger una peli es una aventura, necesitando un programa con la sinopsis de cada película, director, artista, y horario, por que si no es difícil saber lo que quieres ver, pero mi madre hablaba de la radio como un jardín de sueños, y miles de notas para escuchar el latido del mundo.

Yo pienso que entonces la vida era mas sencilla, que todo se hacia al día, que no se pensaba en el mañana nada mas que para ahorrar, y pensar que seria de ellos al ser viejos, aun sabiendo que teniendo hijos, los cuidarían, no como ahora, que las grandes ciudades están llenas de residencias para mayores, donde se deja a los ancianos que mueren de melancolía y soledad, donde se les hace ver que ya es tiempo de morir, porque ya no tienen nada que dar, y molestan en casa.

Como ha cambiado todo ¡¡¡ Madre mía!!! No se si me gustaría vivir así, quizás podría ser mas feliz ya que la sencillez hace que la vida fluya mas tranquilamente, y no como ahora que se va corriendo a todas partes, que se pasea en metro, que perdimos nuestro campo, y que solamente vivimos para llegar al futuro, sin darnos cuenta que simplemente vivimos en el, pero yo me pregunto ¿que se me ha perdido a mi en el ayer?

EL ARMARIO

EL ARMARIO

Coloque mi armario como preámbulo de mi vida, como en otras ocasiones, lo saque todo, la habitación parecía un campo de batalla, y mis sentimientos los proyectiles, que una y otra vez impactaban en mi corazón hiriéndolo de muerte. Intente colocarlo desde fuera, y miraba cada prenda, allí guardada por años, que quizás ya no me pondría nunca, entonces ¿porque guardarla?

Miraba y seleccionaba, me probaba algunas prendas, por saber si aun podía usar las que aun me gustaba, pero me di cuenta que algunas cosas se habían pasado de moda, como decir te amo, o como sentirse pillada por un sentimiento que ni yo comprendía.

Decidí que, todo lo que no me había puesto en los dos últimos años tirarlo, al igual que tire direcciones y teléfonos que no había usado en mucho tiempo, allí vi que no me importaba ir a la moda, y que quería decirte de nuevo te amo.

Entonces el armario empezó a tener un orden, mas colores, y se colocaban jerséis y sentimientos, pantalones y días encontrados, zapatos y sendas por recorrer.

Cada prenda era una sonrisa, cada abrigo un sueño, cada par de medias un recuerdo de tu voz, cada blusa una caricia desabrochando sus botones.

Y así termine el día, y la colocación de mi vida, de mis locuras, de mi sentir desde fuera, y a mi llego la paz y el sueño, la mejor de mis sonrisas al encontrarme con tu música que tanto te gusta, y de nuevo te encontré, y ahora se que te amare eternamente.

EL DESPERTAR

EL DESPERTAR

Me parecía mentira estar oyendo las palabras de mi marido, el amor de mi vida, me decía…

Me despertó cuando yo aun soñaba, y seguramente con él, me dijo; tenemos que hablar, yo le conteste “ tiene que ser ahora que aun no he despertado” y me dijo sí, ahora.

Me levante un poco enfadada, estábamos de vacaciones y todo el día juntos para poder hablar, pero el aun de vacaciones tiene mil cosas que hacer, y el único momento era aquel.

Me dijo, "me voy a Madrid, creo que ya no me quieres", y quiero irme para ver si puedo estar solo, yo me quede de piedra, no había notado que el se sintiese así, entonces empezó a enumerar todo lo que le daba esas pistas…

Decía que yo le decía a todo el mundo que solo sabia hablar de trabajo (cosa que es verdad) y eso le hacia sentirse mal, ya que yo lo decía para menospreciarle, (eso no es así, pero el así lo sentía) y me dijo que no quería sentirse mal al lado de quien no le quería.

Le tome las manos, unas manos ya cansadas de trabajar toda su vida para que yo estuviese bien, unas manos que habían envejecido llenándome de caricias, que me habían ayudado durante 36 años cada día de nuestras vida en común, y ahora esas manos no sentían mi cariño y mi amor.

Nos pusimos a llorar los dos, nos miramos y cada lagrima tenia el miedo contenido de que ambos nos separásemos, por no decir cada día te quiero, por no besarle mas veces, por no tener ganas de hacer el amor últimamente por mi parte, aunque siento que le amo mas que nunca.

Le hable de mi dejadez, pero no pude decir “no te amo”, por que eso no es verdad, le abrace diciéndole te quiero, le dije que quizás había pensado que ambos terminaríamos nuestras vidas juntos, pero yo pensé que ese sentimiento no siempre había que alimentarlo, mimarlo, y hablarlo, y no dar por seguro que todo esta escrito.

Hablamos y nos contamos mil cosas que teníamos sin hablar, nos besamos un montón de veces, y después mi corazón se calmo, mi garganta sollozo, y supe que jamás podría estar sin él.

YO ME PREGUNTO SI LE QUISE

YO ME PREGUNTO SI LE QUISE

Yo aun pienso si le quise…

Mi madre nos enseño a quererle porque ella le quería desde siempre, y jamás nos hablo mal de el, aunque el vivía la vida que quería, sin ataduras, esposa e hijos.

Ahora  pasado el tiempo me hago muchas preguntas porque yo siendo madre se que no se puede dejar de querer a los hijos, son una continuación nuestra, y aun dejando de querer a la esposa, dejar de querer a los hijos lo veo imposible pero a lo mejor nos quería y jamás lo supimos.

A lo mejor nos quiso sin decírnoslo, y sufría de lejos al no poder abrazar a sus nietos, porque la juventud ya lo había abandonado, y sus “historias” dejaron de serlo, por la edad.

Le recuerdo a menudo, pero lo hago después de pensar en mi  Madre que tanto le quiso, y que marcho de este mundo después que el lo dejase, y se marcho triste porque el no estaba para despedirse.

Mi Madre fue la reina de nuestras vidas, de nosotros cuatro sus hijos, que la quisimos por encima de todo, sin pensar jamás si ella tenia alguna culpa de la huida de mi padre, y que supimos que siempre nos protegería de los malos vientos, de un padre vividor, y de una vida que le costo trabajo vivir sin el.

SUEÑOS DE... PÁJAROS

SUEÑOS DE... PÁJAROS

En el mes de Julio, pase unos días en el apartamento de la playa, estando allí una tarde, en el cielo apareció un joven en un parapente con motor, yo me le quede mirando y le comente a un vecino que le gustan esos riesgos lo que había visto la tarde anterior, y me dijo, ¿seriá mi amigo? y todo se quedo así.

Al día siguiente de llegar al apartamento en las vacaciones d agosto, comente con mi hijo pequeño que volar así es entirse pájaro, y que era un sueño para mi, debí ponerle tanto entusiasmo a la cosa, que mi hijo escucho muy atento y así se quedo la cosa.

A los dos días de esta charla, apareció mi hijo mayor con su mujer, y me comentaron que al día siguiente por la mañana irían a buscar un cargador del móvil a Murcia, y que querían que me fuese con ellos, me pareció extraño, pero ante la insistencia accedí, y no se me ocurrió pensar ¿porque íbamos todos a por un cargador del móvil?

Cuando mi hijo me vio arreglada me dijo ¿no tienes otros zapatos? yo me había puesto mis chanclas de dedo, y estaba de lo mas cómoda, y le dije que ¿para que? con esas estaba muy estupenda, y así se quedo la cosa.

Estando en la cocina me dice mi hijo mayor muy serio ¿es verdad mamá que te gustaría tirarte en paracaídas? A mi se me quedo cara de susto, y le comente que si, pero claro no así, sin anestesia, y que yo solo había hecho un comentario con su hermano, y eso era todo.

Y me contesto, mama, no vamos a por ningún cargador, si no a una base donde Fernando ya tiene pagado un viaje para tirarte en parecidas con un “instructor”, en esos momentos me quede muerta, mi hijo mayor había estado toda la noche sin dormir, el pequeño también pero por diferentes motivos, uno por hacer realidad el suelo de su madre, el mayor de preocupación pensando que me podía pasar algo.

Total que nada de paracaídas, ahora mis hijos están enfadados, y yo me siento culpable por no haberme tirado al vació, incluso sin paracaídas.

De ahora en adelante, yo sola viviré mis sueños, en mi cama, y sin contárselo a nadie, porque los sueños solo son eso...

PIRAÑAS...

PIRAÑAS...

Mi hijo pequeño siempre ha sido diferente en todo, con relación a nuestra forma de pensar, de ser, de madurar, y de entender la vida.

Siempre se comparaba con su hermano mayor, quería salir y llegar tarde, aunque ambos se llevan cinco años de diferencia, no es lo mismo un adolescente de 15, que un hombre de 20, pero eso no podía entenderlo, y quería las mismas cosas pero sin obligaciones de nada, sin estudiar, y sin trabajar.

El, era el, y no entendía de edades, mejor dicho no le interesaba entender, el siempre quería ir por delante de su hermano, salía con chicos bastante mas mayores que el, y pronto destaco como matón del grupo…

Los disgustos eran continuos, y aparte de ser un chico cariñoso (con todos menos conmigo) el que no entraba a su bola le sacudía y ya esta, todo el mundo cedía a sus modales menos yo, claro a mi no podía pegarme y yo no te tenia miedo, así las broncas eran diarias. Cambio casi del todo cuando conoció a su mujer.

El, en casa y para seguir haciéndome la contra, cuando yo compre un acuario, el se compro otro pero, había una diferencia enorme, mientras yo lo adorne con peces tropicales de colores, el compro pequeñas Pirañas (y lo que digo es verdad) mis peces empezaron a desaparecer mientras sus pirañas engordaban…

El me decía que cada mañana se encontraba algún pez muerto y lo tiraba, hasta que un día vi a uno de mis peces (ya sin cola) en su acuario, y las pirañas arrancadote la cabeza de cuajo, entonces casi fui yo la que le arranco la cabeza a el, por que yo compraba a diario peces creyendo que se morían, y el cada día alimentaba a sus bichos de mi bolsillo y mi pecera….

Y por arte de magia, sus pirañas también empezaron a morir, porque cuando se iba al cole, yo con un colador sacaba una, la dejaba en la bañera sin agua, y un poco antes de llegar del colegio la volvía a poner en su acuario, cuando llegaba había una menos, hasta que no quedo ninguna, yo le decía, le esta pasando a tus peces lo mismo que a los míos, y yo le preguntaba haciéndome la tonta ¿será el agua?

Después, cuanto tuvo su casa yo le regale un acuario de 300L. a su mujer no le gustan los peces y lo tiene en su despacho, y en ella sus pirañas crecen y crecen, pero el compra comida de pirañas a falta de peces vivos, claro no le sale tan barato como cuando estaba en casa.

Las personas cambiamos, ahora se que era un adolescente difícil, que yo apenas entendía, y como madre eso me hacia sentir mucha angustia, el hacia lo que creía oportuno sin consultar a nadie y yo siempre tenia la duda de si lo hacia bien con el.

Ahora es un padre de familia, su vida es normal en todo, y el tema de las pirañas solo es una anécdota más para recordar y contarle a sus hijos.

MI AMIGA ELENA

MI AMIGA ELENA

Cuando nos conocimos ambas esperábamos a nuestros hijos en la puerta de la guardería, su hija al igual que mí hijo aun no tenían cinco años. Nos hicimos amigas, así por mucho tiempo.

Coincidíamos en el mercado, y ambas hablábamos de nuestros hijos, ella tenia un hijo de unos años mas, yo de unos años menos, y esas cosas eran importantes para nosotras, nuestro tiempo con ellos, éramos jóvenes madres aun no habían llegado los disgustos.

Nuestros hijos crecieron, y un día al salir yo de una de mis clases de Yoga la encontré después de un tiempo sin verla, la di un abrazo y se me puso a llorar, me comento ¡no te has enterado verdad! y ella entonces me contó…

Su hijo había muerto en un accidente de coche, ella decía que lo habían matado, y lloraba desesperadamente, y yo con ella, porque sentí su dolor, sentí su vació, sentí el no haber estado cerca de ella en momentos tan amargos, aunque de nada hubiese servido mi presencia.

Y empezó a contarme cosas que la sucedían en el cuarto de su hijo, le había dado por planchar en esa habitación, y al permanecer allí un rato, una pelota de su hijo se caía de la estantería donde permanecía desde que el la dejo, y rodaba hasta sus pies, así una y otra vez.

Le bajaba cada noche su cama abatible por si estaba cansado y quería dormir un rato, su puerta se cerraba detrás de ella, y allí permanecía en la habitación hasta que el sueño la vencía quedándose dormida hasta el amanecer, allí la despertaba un cascabel que su hijo tenia colgado en un tablero junto a su colección de llaveros, y allí ella lloraba cada día.

La luz se apagaba y se volvía a encender cuando ella hablaba con su hijo ya muerto, cuando ella le preguntaba si se encontraba bien, si le preguntaba si tenia frió…

En verdad que durante un tiempo trate de evitarla, mi cuerpo no podía entender las cosas que mi amiga contaba, dejándome en un estado triste y lloroso cada vez que la encontraba, fueron años difíciles para ella, aun después de pasar por una grave operación, después del día a día, ella intenta dejar pasar el tiempo sin miedo, porque sabe que al otro lado su hijo la espera, sabe que pronto le vera de nuevo.