MUJERES VALIENTES
Todos, a lo largo de nuestras
vidas, hemos conocido a mujeres fuertes, yo en mi familia a varias.
También somos dueñas de
nuestro destino, y muchas veces los que nos rodean ven que vamos directos al
batacazo, aún así decidimos seguir nuestros instintos, así le paso a mi madre.
Mis abuelos vieron que mi
madre iba derecha a ese desastre, le impidieron que siguiera novia de quien
años después sería mi padre, ella le quería mucho, y decidió irse con él y no
hacer caso de sus padres...
Se marchó sin nada, mis
abuelos decidieron no darle la dote que hacía años se estaba haciendo, su amor era más grande que
todo lo malo que mis abuelos decían sobre mi padre, lo peor... Mujeriego, pero
eso es normal en los hombres, (en unos más que otros)
Él empezó a dar señales
pronto de lo que mis abuelos habían dicho, pero mi madre pensaba que
cambiaría... Pero los que son así no cambian, y mi madre empezó a estar sola
muy pronto, pero creyó que algún día
desaparecía esa "afición" tonta ella que le quería tanto que nada
vio.
Y ella, valiente se quedo con
sus cuatro hijos, con un marido que ni se molesto en saber si comíamos o no, si
pasábamos frío, o si en el colegio éramos niños listos y obedientes, por mi
parte... No lo era.
Mi madre se hizo cargo de
cuidarnos sola, poniendo todo su empeño en hacerlo bien, y en preguntarle a mi
padre cuando ella creía necesario que supiera lo que estaba pasando, cosa que
al no le importaba nada.
Y empezó a ser mi hada
madrina, mi Agustina de Aragón, mi Superman, mi
madre siempre fue fantástica y
maravillosa.
Yo la recuerdo casi siempre
triste, mis abuelos pasaron mucho tiempo sin hablarle, pero jamás rechazaron el
mejor pescado que ella tenía en su puesto del mercado de abastos, que cada día
era llevado a su casa para que cenasen de lo mejor...
Mientras tanto, nosotras
crecimos sin nuestro padre, pero no importaba, porque cuando iba a casa todo
eran voces por lo que fuese, después comentaba que sus hijos le rechazaban sin
decir como él se comportaba con nosotros, mientras iba diciendo que mi madre
era una santa, pero él quería santas, el quería juerga y camas calientes de una noche... sin más
compromiso.
Pasado el tiempo
ella se acostumbro a estar sin él pero no dejo de quererle.
Ella no fue a buscarle, no, no dijo ya jamás que le quería, no, el venía a su
suyo, y ella... Se cruzó por su vida, y después le siguió a donde el ya llevaba
varios años esperándola... muerto.
6 comentarios:
Hola Lola, pasaba a darte las gracias por tu visita a mi blog, y me encuentro con esta triste historia, que por desgracia siempre ocurrieron y seguirán ocurriendo.
La vida es como un Rosal. Nos embriaga con su fragancia, y hace sangrar el corazón con sus espinas.
Abrazo
M. Ángel
P.D. Por causas ajenas a mi voluntad comento muy poco.
Pido disculpas.
Gracias M.Angel por tu pronta visita que agradezco de corazón. Un abrazo.
Esta es la vida de muchos, que los consejos de los padres no los escuchamos y nos dejamos llevar por los sentimientos y el amor loco que nace en nosotros.
Afortunadamente que tu madre fue una mujer fuerte que supo salirse con sus hijos.
Besos
Por lo que cuentas Lola, tu madre es todo un ejemplo. De verdad amiga, me ha encantado. Un fuerte abrazo y feliz fin de semana.
Hola Mari-Pi, si que fue valiente mi madre, pero yo sé que hay millones de mujeres valientes que siguen adelante con una vida dura, y que más de una vez quisieran abandonar. Gracias amiga por tu comentario. Un beso.
Hola Pepe, muchas gracias por decir cosas tan bonitas de mi madre, que en verdad fue una verdadera valiente, pero sé que hay muchas sufriendo como lo hizo la mía. Un abrazo.
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