jueves, 29 de octubre de 2015

TIERRA





TIERRA


Se hablaba mucho últimamente de un asteroide que se acercaría mucho a la tierra, este podía causar una gran catástrofe, se decía que jamás habían visto nada igual, que la piedra era tan grande que de acercarse como parecía no habría solución, nada la desviaría, y según parecía nadie podría remediarlo.


Los gobiernos nada decían, las gentes estaban nerviosas, yo pensaba ¿y para qué? Si no hay solución de nada sirve la preocupación, pero no se podía evitar estar así.


Se dio una fecha, y el tiempo avanzaba, la noticia había salido por la televisión, era algo que no sabía cómo atajar ningún gobierno de la tierra, solo el tiempo daría o quitaría razones.


Por entonces se empezó a saber de un gran científico, el que jamás había fallado en sus predicciones, tenía plena confianza dada por las veces que había predicho lo que se acercaba a la tierra, pero el callaba...


Las personas dejaron de vivir el hoy por ese mañana incierto, la gente pensó que si de verdad todo era inminente para que trabajar, y que mas daba robar, había que pasarlo bien era el fin del mundo, si querían un coche que de antemano sabia que jamás tendrían, se pasaba a un concesionario y a punta de pistola y se lo llevaban, la gente había perdido el norte.


No se valoraba nada el sacrificio, todos querían pasarlo bien, y el mundo se convirtió en inhóspito lugar para la vida, desencadenándose un caos jamás visto, pero todos seguían acumulando tesoros, y pisando cabezas, era el fin del mundo, nada era importante más que vivir, pero no al lado de la familia maravillosa, solo tenía sentido la buena vida al precio que fuese.


Cada día el telediario era más asombroso, de nada servía que después de un robo quisieran llevarte a la cárcel, y se recurrió a personas entendidas en la materia, y cuando ya nada se podía decir aparecieron los videntes, esos que engañan al pueblo y que ellos consienten que se les diga lo que hay que hacer.


Después de todo, habían sembrado de muerte el día a día, y de tanto oír apareció en televisión un ser diferente que hablo de los nuevos tiempo, y de las supernovas que produciría ese gran choque, no explicaron lo que eso seria, solo que un mundo nuevo se estaba formando, y ya nadie lo pararía, no había que preocuparse, todo sería maravilloso, había que volver al antes, porque ya se había desviado ese gran asteroide, y nada pasaría, se habló durante días de la familia, de los beneficios de un gran mundo donde la vida seria plácida, con hogares para todos, trabajo, bienestar, y comida sin luchar, se habló de que esos meses anteriores habían servido para concienciar a todo el mundo, y que después de tanto desatino a nada llevaba ese final que además no se produciría.


Llego el gran día, había cambiado el color de las cosas, sobre todo el del cielo, la luz era intensísima, era la nueva vida preciosa y digna de salir a la calle a recibirla, la gente salió, canto, se abrazo, y vio acercarse lo que tanto tiempo habían predicho. Allí se vio un hermoso sol acercándose a la tierra... 


Y ante la prepotencia de los más fuertes, en el centro de mando de los elegidos... Y sintiéndose a salvo...se apretaron los botones del no retorno, y el mundo salto por los aires sin vuelta atrás.



10 comentarios:

Piruja dijo...

Hola Lola, ufff menudo relato que nos tiene en vilo hasta el final, pero si nos fijamos bien en el tiene mucho de realidad, lo de saquear todo cuando ocurren catástrofes, el miedo que nos meten muchas veces sin un porque, y lo peor de todo lo fácil que convencen a las personas de que no pasa nada y luego nos dan el bofetón como en el relato con ese triste final, la verdad que me ha gustado mucho, felicidades:)

Besos.

Olga i Carles (http://bellesaharmonia.blogspot.com dijo...

Todo tiene grandes y pequeñas consequencias. A vees al instante y otras
de manera más lenta...pero se nota si estamos atentos en el plano interior
y el exterior.

Un Abrazo.
Gracias.

volarela dijo...

¡Uau! Formidable cuento. Me has hecho ver el caos, la maldad, la esperanza, la lucha y la contradicció humana... todo en un instante de palabras emocionantes :)

Felicidades. Y ójala nunca llegue ese momento...

Un gran abrazo :)

Amalia dijo...

Enhorabuena por un escrito tan realista y estupendo.

Y un beso grande. Feliz fin de semana

José Ramón dijo...

Lola muy interesante este articulo Saludos

Rosario Ruiz de Almodóvar Rivera dijo...

Lola, muy interesante, gracias por compartir.
Un abrazo fuerte amiga.

Pensando en Haiku, Karin Rosenkranz dijo...

Gracias por compartir este artículo.
saludos

Amalia dijo...

Muchas gracias por tu cariñoso recuerdo.
No sé qué pasará con Google. Yo solo tengo un blog. Hace mucho entré en Google + pero hace mucho que no lo utilizo. Incluso estoy intentando darme de baja .
Un besito grande. Te deseo un feliz fin de semana.
Yo voy muy poquito a poco pues no me puedo hacer a la idea. Gracias por tu cercanía

Kasioles dijo...

Pienso que, cuando ante ti se presenta un futuro incierto y el presente se ve amenazado, podría ser un tiempo fenomenal para dedicarlo a hacer un recuento de nuestra vida, a reflexionar sobre todo aquello que hemos hecho mal y que, como ya no tenemos tiempo para enmendarlo, sólo nos queda el arrepentimiento.
Pero es triste comprobar que, una vez que sabemos que nada malo nos va a ocurrir, volvemos a cometer los mismos errores y seguimos pisando para acumular bienes que no nos podremos llevar jamás a la tumba.
Cariños en abrazos.
kasioles

Ángela dijo...

Lola, buen enfoque le has dado al tema para centrarnos en lo importante.
Te deseo una feliz semana, y que se haga realidad lo que con tanta certeza nos describes.
Un beso.