COSAS NORMALES

COSAS NORMALES

En esta playa por la que paseo diariamente se ven cosas normales pero que no hacemos en nuestro lugar de residencia, eso sí, sí se sabe observar…

Ya empezamos la segunda quincena de julio, hay nuevos veraneantes, personas que a las nueve de la mañana ya están en la playa, y allí estarán todo el día, al menos al principio...

Hoy ya era nuevo el grupo de personas que hacían yoga estos días pasados, ahora la profesora era profesor, y habían cambiado a Taichí, a mi ese me gusta menos, eso de mover energías no es lo mío, pero también me tocaba hacerlo en mis clases de yoga tiempo atrás.

Ayer ya vi a una pareja de la tercera edad el permanecía con los brazos en alto mientras ella le cubría de crema, pero no por la espalda que es lo normal ya que allí no llegan las manos, le echaba la crema por la “barrigota” que digo yo que no siendo minusválido podía tranquilamente hacerlo él, pero se ve que hay muchos que a sus mujeres las tienen de sirvientas… o de lo que sea, ella no tenía cara de buen humor, será que no le gustaba el trabajo que adjudicado a dedo.

También esta mañana, una pareja treintañera permanecía tomando el sol en la toalla, ella con un tanga  que a modo de hilo se introducía entre los “cachetes espalderos” sin dejarle una señal en su piel dorada, mientras que su compañero “taladradora” en mano calentaba para ser usada… y yo digo que siendo una playa familiar, ni era la hora, ni el momento adecuado, pero de todo hay en la viña del señor.

Yo tengo una vecina que dice, yo no veranero yo cambio de estropajo, eso quiere decir que ella sigue haciendo las mismas cosas, mientras todos los demás veranean, sin ayudar a la mujer que también necesita el mismo descanso, después de trabajar sin horario todo el año.

Claro poco se puede reclamar, ellos dicen… encima que “la saco” de vacaciones protesta, y ella por lo bajini responde, mejor déjame en casa…